Lanterns on the Lake - Gracious Tide, Take Me Home (2011, Bella Union)

No hay que perder la esperanza. A veces, hay que dejarse avasallar por lo que llega de las islas, ese panorama musical enmugrecido por lo que patrones y capitanes de la promoción tienen controlado para buscar un nuevo líder, una cabeza visible de ese movimiento que no termina de surgir debido al encierro en el pasado, a la copia y a la lucha imaginaria para tumbar a otros panoramas que no termina por desencadenarse. Tapados bajo esa capa de irrealidad se escondan joyas del buen gusto, del placer de la escucha, de maravillas como la que este grupo formado en Newcastle hace tres años ha conseguido sacar a la luz.

Lanterns on the Lake - Gracious Tide, Take Me Home (2011, Bella Union)

Su visita y buenas referencias obtenidas en el SXSW de Austin han hecho que Lanterns on the Lake saque un trabajo formado de paisajes luminosos y emotivos con miradas a bandas como Mazzy Star, Low o Sigur Ròs, una congención de placeres y buen gusto que la prensa de aquel país no se preocupa de promocionar y por otro lado, de no abrir esa grieta que permita su hundimiento. 'Gracious Tide, Take Me Home' (2011, Bella Union) es un debut con cara de obra culmen, con regusto a disco de cámara que marcaría pautas a seguir si no se contaminara por el virus llamado 'prensa musical'. Desde sus primeros matices con Sleep Whale en la penumbra en que las inseguridades plasmadas en 'Lungs Quicken' el sexteto demuestra que sus cualidades son dignas de ser admiradas y disfrutadas para lo que se nos viene encima a lo largo de sus once cortes decorados entre violines y mandolinas.

Bañados en tintes de electrónica y sensibilidad vocal se fabrica este debut aderezado de folk y rock que llega a ganarse el calificativo de celestial con 'Keep On Trying' bajo el melódico susurro de Hazel Wilde te instiga a decidir por ti mismo. Un título al disco que evoca el regreso a la costa donde creció, ese viaje en que se sumergió ella misma junto con Paul (productor) y que instrumentalmente han sabido plasmar casi a la perfección, en el mensaje a las luces que surcan el agua que se convirtieron en sus vecinos ('...ships in the rain I'll see you again...') y que dejan abierto el camino para liberar el lado más pop en que saben trabajar los violines enervados gracias a 'A Kingdom', otra muestra de pérdida de ilusiones pese a su plenitud esperanzadora ('...I heard the call, a city fall/a ship sailed through the last breath of the dawn...') inspirada en aquellas cartas que los soldados de la II Guerra Mundial mandaban a casa.

Atmósferas llenas de sueños, de deseos, de sentimientos a flor de piel capaces de colapsar los sentidos en que nos mueven sus melodías, en ser patrones de viajes elegidos para dejar que nos surquen como mares tempestivos en épocas de nubes oscuras sobre nuestras cabezas y ganas de poder volver al resguardo ('The Place We Call Home', 'Tricks') sin temor a estar enfrentándonos ante un desapercibido trabajo que sabe hacer trizas los cánones ya preformados. Referencias al mar, algo que parece no solo un recurso lingüístico sino que guarda gran cantidad de significado en las vidas de ellos y que incluso en el único tema cantado por Adam Sykes presente también en su Ep 'The Starlight' (2009, Bella Union), surgen referencias. 'If I Was Unkind' (...thought I saw you next night you were nowhere to be seen/'cos it's probably best, wasn't such a nice dream...') es el hipnótico corte con que guían el camino a seguir para hacer de este uno de los mejores lagos donde poder perderse durante los meses de pocas horas de luz que nos esperan pese a ser un rayo de luz para sacarnos a primera plana esa emotividad que a veces escondemos por el temor de no tener una buena referencia a la que seguir y que nos pueda acoger cuando los requerimos. Ellos saben como poder llevarnos a casa, a ese lugar donde el temor desaparece, donde el peligro que nos acecha no puede entrar gracias a esas linternas que han conseguido encendernos para evitar que nos extraviemos durante esta larga travesía.

Lanterns On The Lake - The Places We Call Home