La locura más larga de The Flaming Lips

Podríamos coger un papel y boli para poder establecer una encuesta entre nuestro círculo de amigos más cercanos y preguntar a cada uno de ellos cuán divertido les ha parecido durante su juventud el tener una canción en que su nombre ha sido pronunciado hasta la saciedad. Podríamos hasta apostar que ganarían las caras de odio hacia nuestra persona. Pues ahora, si en los tiempos que corren tienes el módico precio de 75€, puedes hasta igualar a esas personas que en algún momento de su vida gozaron de sus minutos de fama radiofónica.

The Flaming Lips se sacan otro boleto al manicomio

Esta hilarante idea es la nueva propuesta de (esos chalados llamados) The Flaming Lips, liderados por el no menos estrafalario Wayne Coney, en su afán por superarse en su podio de rarezas y locuras propias. Comunicaciones publicadas días atrás apuntaban que la banda se prepara para realizar una canción en la que quepan alrededor de 10.800 nombres, número similar a censos de distintas poblaciones, en el breve tiempo de 6 horas que duraría la misma. Pero claro, hay algo de truco, puesto que los beneficios obtenidos por parte de esta broma pesada se destinarían a la Sociedad Humanitaria de Oklahoma así como a la Universidad pública del estado. Una locura de buen corazón que no es la única ni será la última que estos americanos realicen.

Decimos esto porque quien haya asistido a cualquiera de sus conciertos ha podido vivir la experiencia del espectáculo que se cargan a las espaldas -aunque lo de la bolita de plástico sea como un regreso al pasado-, especialmente en la última entrega del San Miguel Primavera Sound donde días antes twitter era testigo de las maravillosas vistas de la ciudad de Barcelona en el espacio que el cuerpo desnudo de su esposa Michelle permitia ver. Años atrás ya decidió intentar un reto como el realizar un poster con su propia sangre "por no usar la de pollo" o el lanzamiento de cuatro pendrive dentro de gelatina comestible por la ínfima cantidad de 150 dólares.

Acostumbrados a locuras estamos, sólo falta saber quienes serán los "afortunados" que tendrán su nombre en esa composición que apunta a récord Guinness. Si alguien tiene suelto, que nos vaya contactando, solo por colaborar, claro.