Esa mente inquieta llamada...Will Johnson

En este campo tan amplio que es la música debe haber de todo. Hay quien escribe temas que parecen haber sido sacados de un molde en que todo, sea quien sea quien lo haga, suena igual; hay también quien, no haciendo honor a la idea, se cuelga una etiqueta musical para ser seguido por un gran bloque de público y también, en todo esto, hay mentes inquietas que abren horizontes. Estas mentes inquietas se esconden tras varios nombres, sonando, por lo general, de manera distinta y, casi siempre, bien.

Will Johnson

Estos especímenes en peligro de extinción se caracterizan por varias cosas, entre las que destacan su imposibilidad por detenerse en el afán compositivo, tener una gran destreza en el desglose y estructura de los instrumentos en cada tema y, de manera inteligente, no dejar que todas sus ideas se mezclen tras un mismo nombre. El que hoy centrará nuestra atención lo hace concretamente tras tres de ellos como son Centro-Matic, South San Gabriel y el suyo propio, Will Johnson. El texano tiene la capacidad de crear a diestro y siniestro temas que se impregnan de unas dosis de emoción a granel, un rock tierno y clásico que, sin quererlo, da lecciones de como se debe buscar la exposición de ideas y que le llevaron a ser reclutado por aquel supergrupo llamado Monsters of Folk, donde parece que se reúnen cabezas como la suya o a compartir escenario con Micah P. Hinson hace unos meses. Y este año, con Centro-Matic, tendremos por abril nuevo trabajo llamado 'Candidate Waltz'

Eyas (2010)

El pasado año, en forma de EP, Will Johnson fusionó por segunda vez a sus dos bandas titulares (Centro-Matic y South San Gabriel) para exponer lo que en ese momento se le pasaba por la cabeza en una colección de 7 temas repartidos a favor de la primera banda mencionada y donde sobresale una 'Cracking the Seal' con un minuto final abrumador decorado por histriónicas y emocionales guitarras y que se acompaña de una preciosa 'Liquidation Heart'. La parte de South San Gabriel a los mandos es la que cierra el disco con tres temas de bajas revoluciones -versión de Lionel Richie incluida- , como el querer desembocar en una llanura musical que colma de hermosura ese piano que comanda 'Inhabitants', la canción seguramente más penetrante de todo este corto pero intenso trabajo.

'Eyas' es el nombre de este disco, de estos siete temas dignos de ocupar un espacio en nuestra discoteca, demostrando que quien posee talento no necesita grandes producciones para dar rienda suelta a obras de gran calado. Canciones para una tarde de introspección de la mano de esta mente incapaz de mantenerse parada; todo un auténtico lujo.

Si quieres escucharlo, dale al play: